lunes, 31 de mayo de 2010

Productos ecológicos en la industria agroalimentaria navarra.

El 45% de las industrias agroalimentarias de Navarra trabajan con productos ecológicos, lo que representa 76 empresas y más de 500 alimentos certificados como ecológicos, según ha subrayado la consejera Begoña Sanzberro en la inauguración de la Semana Ecológica de Navarra.

De acuerdo con estos datos, Navarra es, en términos relativos, uno de los líderes nacionales en la producción de alimentos ecológicos, dado que cuenta con más del 11% de la superficie cultivada dedicada a esta actividad (30.800 hectáreas).

La consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente ha inaugurado la VI Semana Ecológica de Navarra que se celebra en Tudela hasta el 30 de mayo y que está organizada por el Consejo de la Producción Agraria Ecológica de Navarra (CPAEN) con la ayuda del Gobierno foral.

El objetivo de la semana ecológica, que se celebra bajo el lema "Alimentos Eco. El Futuro" es promocionar la producción y consumo de los productos ecológicos, especialmente los alimentarios, así como explicar la contribución que se puede realizar al desarrollo sostenible en general.

Para ello, según ha precisado en un comunicado el Gobierno de Navarra, se han planteado actividades gastronómicas (cocina y maridaje) talleres o charlas informativas que tratarán todos estos aspectos.

Tras la inauguración, que se ha celebrado en el Centro Cultural Castel Ruiz de Tudela, se ha hecho entrega del II Premio de Difusión de Alimentos Bio a la empresa Gumiel y Mendía de Lodosa.

Dicha fuente ha subrayado que se trata de uno de los operadores ecológicos más veteranos de Navarra que cuenta con quince años de actividad en producción, importación, almacenaje y distribución.



M.Prieto/Asociación Vida Sana - ABC.es/EFE

domingo, 30 de mayo de 2010

Viticultura ecológica: confusión sexual en lugar pesticidas.

La “Eupoecilia o Clysia Ambiguella” es un parásito de la vid, y ,con el objetivo de frenar su reproducción sin recurrir al uso de pesticidas, los viticultores de la región francesa de Champagne han puesto en marcha una gran operación de confusión sexual.

La técnica de la confusión sexual consiste en difundir en la viña feromonas similares a las que emiten las hembras de estas mariposas para atraer a los machos. De esta forma, los machos, perturbados por todos los mensajes que reciben, se ven incapaces de localizar a las hembras que deberían fecundar.

La confusión sexual es un método permitido por el pliego de condiciones de la agricultura ecológica que permite frenar la reproducción de mariposas y el nacimiento de estas larvas denominadas “gusano de las uvas”. Estos parásitos se instalan en los granos de uvas y engendran una podredumbre que se extiende por toda la viña.

Los viticultores franceses aplicarán en esta operación unas 550 cápsulas de feromonas por hectárea sobre una superficie de 800. Según comenta Pierre Larmandier, del Sindicato general de viticultores, "se trata de la mayor operación de confusión sobre un mismo sector. Hemos convencido al 90% de los viticultores de la zona para que adopten este método. Sin necesidad de aplicar ningún tipo de tratamiento fitosanitario, reducimos un 70% la población de mariposas, obteniendo unos resultados equivalentes a los que obtendría un tratamiento fitosanitario convencional".

Una vez aplicadas, las cápsulas de feromonas permanecen toda la temporada, mientras que los tratamientos químicos, “nocivos para el medioambiente y para la viña”, necesitan ser renovados varias veces. Además, el coste de una operación como esta es idéntico al tratamiento químico convencional.

Para saber más:

http://www.horticom.com/empresas/pdf/58309/7169.pdf



M.Prieto/ Asociación Vida Sana -LAdyverd.com/ maxisciences.com

viernes, 28 de mayo de 2010

Superalimentos para niños.

Incorpora estos superalimentos a la dieta diara de los niños para ayudarles a crecer sanos y con energía.

Bayas: arándanos, fresas, frambuesas y moras son alimentos favoritos de niños y adultos por igual. Están repletos de antioxidantes y vitaminas A y C; y son una buena fuente de fibra. Un puñado de bayas frescas es un buen aperitivo. Añadir bayas frescas o congeladas a los batidos, bizcochos, yogures, crepes, cereales, ensaladas y puddings.

Yogur: el yogur es una gran fuente de proteínas y calcio para los niños en crecimiento. Las bacterias "buenas" presentes en el yogur fomentan un sistema digestivo saludable y estimulan la función inmunológica. El yogur natural también es rico en fósforo, riboflavina y vitamina B12. Procurar mezclar el yogur con miel, nueces, semillas, frutas o cereales para tomar un desayuno o refrigerio saludable. Utilizarlo en productos al horno, batidos, salsas, aderezos para ensalada, etc.

Cereales integrales: los cereales integrales proporcionan hidratos de carbono, principal fuente de combustible para los niños activos. Son ricos en ácido fólico, hierro, zinc y vitaminas del grupo B. La fibra que contienen los cereales integrales evita que los niños experimenten las fluctuaciones de glucosa en sangre que a menudo se producen con la ingesta de granos refinados y que pueden contribuir a bajones de energía. en cualquier supermercado se puede encontrar una amplia variedad de harinas, pan, galletas, cereales y pastas integrales. Explorar nuevas harinas con los hijos. Probar las de quinoa, mijo, arroz integral, avena y kasha.

Pescado: el pescado es una gran fuente de ácidos grasos Omega-3 y proteínas. Los ácidos grasos Omega-3 son esenciales para el crecimiento normal y el desarrollo del cerebro. Dado que el contenido de mercurio presente en algunos pescados puede ser perjudicial para los niños, limitarse a tomar variedades de pescado azul con bajos niveles de mercurio como el salmón salvaje, la trucha de agua dulce, las sardinas, el atún troceado en agua, la tilapia y el pez gato. El pescado se puede preparar y servir de formas muy atractivas para los niños, como los wraps de ensalada de atún, trozos de pescado al horno o tacos de pescado.

Frutos secos: los frutos secos son ricos en vitamina E y grasas saludables para el corazón. También tienen una poderosa acción antioxidante y constituyen una excelente fuente de fibra y proteína. Son una buena elección las nueces, las almendras, las avellanas, las pacanas, los pistachos y los anacardos. Las mantequillas de frutos secos son populares entre los niños. Asegurarse de elegir variedades sin azúcar y aditivos. Espolvorear unos frutos secos en los yogures, cereales, frituras, pastas y ensaladas. Tomarlos crudos o dejar que los niños hagan su propia mezcla.

Verduras: cuanto más colorida, más nutritiva será la verdura. A los niños les gustan especialmente las zanahorias y las batatas, debido a su sabor dulce. Estas verduras son ricas en beta caroteno, vitamina C y hierro. Las batatas al horno son una delicia para los niños. Animar a los niños a comer verduras, ya que son una fantástica fuente de calcio. Añadir un poco de sal durante la cocción resaltará su dulzura, aumentando su atractivo.

Huevos: los huevos son un alimento estupendo, porque contienen todos los aminoácidos necesarios para la construcción de proteínas en el cuerpo. También son una gran elección debido a su contenido de colina, importante para el desarrollo cerebral. A los niños les suelen gustar revueltos o "fritos". También se pueden hervir para disfrutar de un tentempié sencillo y fácil de transportar.

Judias: las judias constituyen una excelente fuente de fibra y proteína y añaden un impulso nutricional a la dieta de un niño. También son ricas en hierro, un mineral importante para el crecimiento en los niños de todas las edades. Añadir habas o lentejas a los tacos, wraps, sopas, nachos y al chile. A los niños les encanta mojar en las salsas, por lo que podemos utilizar
las habas para preparar salsas y humus.

Fuente: Super foods for super kids

jueves, 27 de mayo de 2010

El consumo de leche ecológica aumenta progresivamente en España.

Cantabria y Galicia abastecen la demanda de leche orgánica que no cubre Asturias. Las 15 ganaderías «verdes» de la región sólo producen 621.500 litros al año de un total de 600.000 toneladas de cuota

Asturias, con todo a su favor para producir leche ecológica, arroja el pobre saldo de contar solamente con 15 ganaderías lácteas inscritas en el Consejo Regulador de la Agricultura Ecológica. El déficit de materia prima hace que las industrias asturianas que elaboran yogur, arroz con leche, cuajada o quesos con la etiqueta de producto ecológico tengan que abastecerse en Cantabria y Galicia.

En 2009 la cantidad de litros de leche ecológica oficialmente registrada fue de 621.500 litros, una cantidad ridícula sobre la cuota láctea total de Asturias, que es de 600.000 toneladas.

Además, de las quince ganaderías, solamente nueve funcionan al cien por cien. El resto se encuentra en proceso de conversión. Los expertos no acaban de entender qué es lo que impide el despegue de un producto que genera una alta demanda y que se produce en base a forrajes, que se encuentran de forma natural por todo el medio rural asturiano.

De hecho, muchos de los productos lácteos ecológicos que se encuentran en los puntos de venta de Asturias proceden de otras regiones debido a la falta de producción en Asturias. Carlos Nuño, técnico del Copae, estima que el crecimiento del sector debe pasar por aumentar el número de empresas asturianas de agroalimentación que se dediquen a la transformación y comercialización de productos ecológicos. «Así los ganaderos se sentirán más motivados para producir».

El paso de la ganadería convencional a la ecológica se realiza a través de un proceso de «conversión». En el caso de la leche ecológica el sistema va directamente ligado a las posibilidades de la ganadería para extender el territorio dedicado a pastos.

Los problemas relativos a la ganadería ecológica, que pueden incluso hacer reversible la conversión, serían, por una parte, los derivados de una baja de los precios y ayudas oficiales, o de una venta sólo parcial de la leche al precio de la ecológica como sucedió en Asturias hace años.

Hay que contar, además, con la existencia de costes relativos a la calidad agroalimentaria, a la protección ambiental y a la eficiencia energética. Aguilar señala que la producción ecológica de leche puede verse como una estrategia de diferenciación en busca de mejores precios y de una participación social en los costes de producción.

Uno de los factores de los que depende el éxito de las ganaderías ecológicas es un buen sistema de producción extensivo.

La ganadería ecológica de leche en las 15 ganaderías que hay en Asturias «emplea» a 472 vacas.

De las nueve ganaderías plenamente calificadas como «ecológicas» solamente dos destinan su producción a la transformación en empresas lácteas radicadas en Asturias, para la elaboración de yogur, arroz con leche, queso y natillas.

Leche líquida

El resto de la producción la comercializa el grupo Lactalis para su posterior envasado en Lugo y venta de leche UHT de la marca President, en su modalidad ecológica.





M.Prieto/Asociación Vida Sana - LNE.es

miércoles, 26 de mayo de 2010

Desayunos en colegios, catas y degustaciones en la IV semana ecológica de Andalucía.

Más de 200 actividades, entre las que figuran desayunos con productos ecológicos en colegios, catas y degustaciones en comercios, se han programado dentro de la IV semana ecológica, que se inaugura hoy y se desarrollará hasta el 30 de mayo en Andalucía.

Con este iniciativa, promovida por el Comité Andaluz de Agricultura Ecológica (CAAE), se pretende difundir ente los ciudadanos las ventajas sociales y ambientales de la producción ecológica de alimentos, así como los beneficios para la salud de su consumo, ha informado dicha asociación en un comunicado.

También se llevarán a cabo concursos infantiles de dibujo y fotografía, exposiciones, jornadas técnicas y talleres y visitas a fincas de producción ecológica, entre otras actuaciones.

En la ponencia de apertura, María Dolores Raigón, de la Escuela Técnica Superior de Medio Rural y Enología de la Universidad Politécnica de Valencia, ha puesto de manifiesto los rasgos diferenciales que presentan los alimentos ecológicos frente a los alimentos convencionales.

En este sentido, Raigón ha destacado que los productos ecológicos se caracterizan por ser "respetuosos con el medio ambiente, ya que ayudan a mantener la productividad y el equilibrio biológico del suelo, además de tener una gran calidad al no contener ningún tipo de residuo químico".

Explicó que en el caso de leche o huevos ecológicos, los animales que los producen deben alimentarse exclusivamente de productos biológicos y las aves de corral son alimentadas sin antibióticos ni otros productos que aceleran el crecimiento y engorde del animal.

Todos los productos ecológicos se distinguen con un sello oficial que certifica que cumple con todos los requisitos obligatorios para ser considerados ecológicos.



M.Prieto/Vida Sana - Finanzas-EFE

martes, 25 de mayo de 2010

La cebolla, una alternativa natural a los conservantes artificiales.

Las propiedades antioxidantes y antimicrobianas de los flavonoides presentes en la cebolla cruda hacen que sea un buen candidato para su uso en la conservación de los alimentos según los autores de un proyecto llevado a cabo en el Departamento de Ingeniería Agroalimentaria y Biotecnología de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC).

El estudio, que se acaba de publicar en la revista International Journal of Food Science and Technology, muestra que los flavonoides de la cebolla, además de tener propiedades beneficiosas para la salud, aumentan la vida útil de los alimentos, por lo que podrían ser una alternativa natural a los aditivos artificiales utilizados en la industria alimentaria.

Los resultados confirman que, sobre todo la variedad amarilla, es una buena fuente de este tipo de sustancias y hay una correlación positiva entre la presencia de flavonoides y su capacidad antioxidante.

Según los investigadores, la cebolla puede ser eficaz para retrasar la oxidación lipídica en emulsiones de aceite y agua - un proceso modelo en alimentos como las margarinas y las mayonesas -, y además inhibe el desarrollo de microorganismos que alteran los alimentos.

Fuente: Science Daily

lunes, 24 de mayo de 2010

Bisutería sostenible de materiales naturales.

La compra de bisutería elaborada con materiales naturales alienta la preservación de los bosques de las comunidades indígenas. No se cortan los árboles para la cosecha de estos materiales, por lo que es una fuente sostenible de ingresos para dichas comunidades. Su uso brinda a los indígenas el acceso a un mercado fuera de su entorno y por lo tanto una alternativa económica a la venta de sus tierras, la protección tanto de una forma de vida como de los preciosos bosques de la tierra.

La Tagua proviene de la Palma de Marfil ecuatoriano, cuyo nombre científico es Phytelephas aequatorialis o "planta de elefante", que florece en las tierras bajas de América del Sur. La palma de tamaño medio alcanza unos 15 metros de altura, crece rápida y fácilmente en lugares umbríos ocultos bajo los árboles más grandes. La tagua se extrae de las vainas grandes que salen del tronco de la palma. Estas vainas regenerativas pueden recogerse directamente del árbol o una vez que caen al suelo. Si se recolecta en estado temprano, la tagua es una fruta comestible y blanda, parecida al interior de un coco. La recolección tardía ofrece una tagua blanca y extremadamente dura, lo que hace que se la conozca como marfil vegetal "por su sorprendente capacidad para ser tallada y pulida. La tagua es un material natural perfecto para hacer abalorios, botones, y figuritas. De hecho, antes de la edad del plástico, la tagua se utilizaba para producir grandes cantidades de botones para los mercados mundiales. Ya sea teñida a mano en un amplio espectro de colores o dejada en un estado más natural, la versatilidad de este fruto seco hace que sea una adición única para cualquier pieza de joyería.

La semilla Açaí procede de la palma de Acai (Euterpe oleracea) en las selvas de América del Sur. Esta palmera crece principalmente en los pantanos y llanuras inundadas y alcanza entre 10 y 20 metros de altura. Los frutos son pequeños, redondos, de color morado negruzco, crecen en racimos densos y contienen una sola semilla. La fruta se cosecha para su consumo, fundamentalmente en forma de bebida, especialmente en Brasil, y ha ganado fama mundial en los últimos años debido a su alto nivel de antioxidantes y sus propiedades energizantes. Aparte de su uso alimentario, la palma tiene otros usos comerciales. Las hojas se utilizan para realizar trabajos manuales diversos, tales como sombreros y canastas y la madera se puede utilizar para la construcción. Mientras, las semillas resultan atractivas por su singularidad y tamaño delicado.

El cocotero (Cocos nucifera) se cultiva en las zonas tropicales de todo el mundo ya que tiene preferencia por suelos arenosos, luz solar abundante, altas temperaturas y precipitaciones regulares. Se trata de una palmera de gran tamaño que crece hasta los 20 metros de altura, con hojas de entre 3 y 6 metros de largo. El coco es la semilla o nuez de la palma de coco, que se puede recolectar directamente del árbol o simplemente esperar hasta su caída. El coco se compone de varias partes: la cáscara, la piedra interior, la "carne" y el agua. Estos componentes tienen muchos usos, incluidos los culinarios. Un coco verde grande contiene hasta un litro de agua que se sirve a menudo como una bebida fría. También se utiliza como ingrediente en diferentes platos tradicionales del mundo. Los usos no culinarios son numerosos. Por ejemplo, el aceite de coco se utiliza en medicina y cosmética, mientras que las hojas sirven para elaborar canastas y tejados. El hermoso color marrón de la cáscara de coco también proporcionar un material perfecto para todo tipo de joyas y botones rústicos.

Huayruro. La Ormosia coccinea es un gran árbol que crece a lo largo de los bosques de América del Sur. Sus semillas, conocida comúnmente como huayruro, se encuentran dentro de una vaina y son de un rojo intenso y negro. Los peruanos las han utilizado durante generaciones como un amuleto para atraer fortuna y las han incorporado históricamente en adornos y joyas. Estas semillas son de varios tamaños y se recogen del suelo del bosque. Las semillas de Huayruro son venenosas si se ingieren y deben mantenerse fuera del alcance de los niños.

Jabón. Las semillas de la planta de jaboncillo aparece en una gama de colores entre el marrón oscuro y el negro. Su forma es perfectamente redonda y resulta ideal para elaborar collares y pulseras. El árbol del que proceden es alto y se da especialmente en las provincias ecuatorianas de Imbabura y Esmeraldas, con elevaciones más bajas y un clima más templado. Los lugareños las recolectan del suelo del bosque. La capa exterior de la semilla se ha usado tradicionalmente como el jabón, de ahí su nombre. Cuanto más se utilizan las cuentas, más oscuras y brillantes se vuelven, debido el contacto con los aceites naturales de la piel. También se puede aumentar su brillo frotándolas con aceite mineral.

Pambil. Iriartea corneto es una de las grandes palmeras de América del Sur. Con una gran copa, elevada altura y raíces como zancos, el pambil es un recurso esencial para la cultura quechua del Perú y Ecuador. Su madera se utiliza para la construcción de viviendas, lanzas, arcos y cerbatanas, y las hojas se entraman para colocar en los techos de las chozas nativas. El fruto de la palma pambil es de aproximadamente 1 pulgada de diámetro y contiene la semilla, que las culturas indígenas utilizan habitualmente en joyería. Admite diversidad de colores sobre su tono marfil natural.

Imagen: The Andean Collection

Fuente: www.ecogaia.com

domingo, 23 de mayo de 2010

Comedores ecológicos para recuperar la calidad del agua.

El municipio francés de Lons-le-Saunier, situado al norte de Lyon, ayuda a sus agricultores a convertirse a la agricultura ecológica. Los comedores públicos del municipio sólo sirven productos ecológicos suministrados por los agricultores de la zona. El motivo principal que propició esta iniciativa fue el afán de recuperar la calidad de las aguas subterráneas, contaminadas anteriormente por la agricultura intensiva.

Este año, miles de escolares de Lons-le-Saunier (departamento del Jura) podrán degustar carne de buey ecológico en los comedores del colegio sin tener que abonar ni un céntimo de más. Este privilegio lo gozarán también los ancianos en sus comedores, así como varias empresas y mil pacientes y usuarios del hospital municipal. La principal responsable de alimentar a diario estas aproximadamente 5.000 bocas de 48 municipios a 30 kilómetros a la redonda es la cocina municipal de Lons-le-Saunier. Desde hace 10 años, esta población extiende poco a poco la influencia de la agricultura ecológica en sus servicios de restauración colectiva.

Detrás de esta operación se encuentra una iniciativa con una larga historia que, emprendida por la responsable de cocina y el teniente de alcalde responsable del medioambiente del pueblo, se propuso devolver a las aguas subterráneas de la villa su antigua calidad. La obstinación de estos dos trabajadores del pueblo ha sido recientemente recompensada mediante una serie de premios y una distinción de la agencia francesa para el fomento y desarrollo de la agricultura ecológica “Agence Bio”. Según la directora de la agencia, Elisabeth Mercier, “el circuito de proximidad del abastecimiento de alimentos es encomiable”.

La historia comenzó a principios de los años 60, cuando Lons-Le-Saunier se enfrentó a un periodo de escasez del agua de montaña. La villa decidió entonces explotar las capas freáticas cercanas, cubiertas de húmedos pastos. Veinte años después, la agricultura intensiva hizo que aumentara la concentración de nitratos de la fuente de 1 a 30 miligramos por litro, que excede el límite recomendado para los bebés.

A comienzos de los años 90, el nuevo alcalde reunió a los 15 agricultores de la zona y los convenció para que mejoraran sus métodos en 220 hectáreas a cambio de ayudas municipales. Después de una década, los nitratos se habían estabilizado en una concentración de 20 miligramos por litro.

En 2001, para mejorar la situación, el alcalde propuso impulsar la agricultura ecológica utilizando el incentivo de los comedores públicos. “Nuestro sistema de concesiones a los servicios de agua y la restauración colectiva nos ayudó mucho”, comenta el portavoz de la alcaldía. A continuación, el ayuntamiento persuadió a un agricultor para que convirtiera sus cultivos de trigo a la agricultura ecológica garantizándole un volumen de compra y un precio fijo, mientras que una panadería local aceptaba certificarse para producir pan ecológico.

Suministro directo

Con el paso de los años, la cocina central y el ayuntamiento lograron convencer a los ganaderos de ovejas ecológicas para que suministraran sus productos a una fábrica de yogures y quesos, al mismo tiempo que apoyaban la reimplantación de los huertos locales. « Partimos siempre de los recursos locales disponibles. De esta forma decidimos que el forraje ecológico producido por nuestros agricultores podría alimentar a nuestras vacas ecológicas« , comenta el adjunto y responsable de medioambiente del ayuntamiento.

Después de algunos titubeos, el consumo de buey ecológico se ha generalizado, y el año pasado se sirvieron 5.000 comidas gracias a la adquisición de 300 animales a 25 ganaderos.

Existen algunas diferencias entre los proveedores ecológicos locales y los mayoristas."Con los mayoristas, siempre teníamos la posibilidad de pedir de un día para otro sin problemas. En el sistema de suministro directo es necesario gestionar las fluctuaciones, como por ejemplo una huelga escolar o las vacaciones."

En la actualidad, 45 agricultores suministran de forma directa a la cocina municipal y son ya 200 de las 920 hectáreas situadas en el perímetro que rodea a los pozos de agua las que se han convertido a la agricultura ecológica. En los comedores municipales se sirve una treintena de productos ecológicos, lo que en 2009 representó el 12% del total. Este porcentaje es todo un éxito si lo comparamos con el 20% que el plan nacional de medioambiente se ha propuesto como objetivo para Francia en el año 2020.

La gestión del ayuntamiento y de la cocina municipal permite limitar la contaminación de las aguas y evitar la instalación de sistemas de depuración. Teniendo en cuenta que el coste de las desnitrificación del agua supone 1 euro por metro cúbico, la rentabilidad del proyecto es incontestable.

Sin embargo, debido a que los 14 agricultores más próximos a los pozos aún no han decidido pasarse a la agricultura ecológica, las aguas aún no han recuperado la calidad que poseían antes de que la agricultura intensiva aumentara su contenido en nitratos de forma excesiva.

Fuente: www.ladyverd.com

viernes, 21 de mayo de 2010

¿Qué fue del tomate? ¿Qué fue de la manzana?

Existen varias causas responsables de la desaparición de numerosas especies vegetales en la tierra. Estas causas son mayoritariamente provocadas por la acción del hombre: contaminación, sobreexplotación y cambio climático. La perturbación de los ecosistemas avanza a un ritmo mucho más elevado que el curso natural de extinción, lo que propicia la rápida pérdida de biodiversidad.

Desde que las máquinas sustituyeron al trabajo físico, el hombre ha intensificado la actividad agrícola no para conseguir más especies, sino para aumentar el rendimiento de la tierra y sus beneficios. Esta producción intensiva se resume en cinco puntos: monocultivo, alto rendimiento, abonos químicos, pesticidas y mecanización.
Poco a poco, frutas y hortalizas de toda la vida van siendo sustituidas por nuevas variedades provenientes de sistemas agrícolas intensivos. El número de especies provenientes de la agricultura extensiva (por oposición a intensiva) ha ido disminuyendo a medida que el mercado mundial de semillas pasó a ser una cuestión económica de enorme magnitud.

El tomate

Las multinacionales llevan a cabo una selección de especies vegetales basada en su potencial comercial. Este hecho se puede constatar en los comercios especializados y en los supermercados: los frutos, en muchas ocasiones, son productos híbridos de idénticas medidas y calibre que conservan su color y su estado con el paso del tiempo. Un claro ejemplo es el tomate, que podemos introducir en la nevera y cuyo aspecto permanecerá inalterado durante semanas.

A principios del siglo pasado existían 7.000 variedades de tomate. Actualmente, la Unión Europea censa apenas unas 150, de las cuales sólo 70 se comercializan. En los mercados encontramos, hoy en día, unas 5 variedades de tomate.

La manzana

El caso de la manzana es bastante similar. A principios del siglo XX, en Francia existían 3.600 variedades del preciado fruto. Hoy en día, en los puestos de los mercados, se encuentran unas 10 variedades de manzana.

La patata

La patata no es una excepción: la totalidad de las patatas fritas que abastecen a la mayoría de los restaurantes de comida rápida del mundo provienen de 4 únicas variedades de patata.

La agricultura intensiva, cuyo principal objetivo es el beneficio económico, repercute de forma negativa para el hombre y el medioambiente: en el afán por incrementar la producción, los productos provenientes de la agricultura intensiva acaban contaminados por numerosos pesticidas, lo que provoca una pérdida de vitaminas, la ausencia de sabor y unos riesgos cada vez mayores para la salud del hombre y del planeta.

El consumidor ideal

Mediante el cultivo de especies diseñadas para lograr un alto rendimiento, las multinacionales y los supermercados han conseguido estandarizar nuestra alimentación en detrimento de la biodiversidad. Han conseguido unos enormes ahorros económicos y han creado un perfil de consumidor ideal. La competición por lograr un mayor margen para unos y la cultura del consumismo para los otros han llevado a la modificación de los hábitos alimenticios de la población.

La alimentación ha dejado de ser el principal gasto en el presupuesto familiar, que ahora han pasado a ser la vivienda y el transporte. La alimentación se encuentra en tercera posición debido al gasto en productos cárnicos y elaborados, muy por encima del de frutas y hortalizas frescas, en continuo descenso.

Muchos ciudadanos europeos no consumen ni frutas ni verduras frescas debido a su elevado precio. Sin embargo, a menudo, aquellos que se ven disuadidos de adquirir un kilo de manzanas por tres euros no dudan en gastar 100 euros en la compra de un nuevo modelo de teléfono móvil.

El comportamiento de los consumidores conlleva una importante incidencia sobre la biodiversidad: para producir 1Kg de carne se necesitan 7Kg de cereales. En media hectárea de tierra cultivable pueden producirse 70Kg de buey o 10.000 kilogramos de patatas. Para las multinacionales, cuyas elecciones se basan en la rentabilidad financiera a corto plazo, no cabe duda: la carne se vende mejor. En este contexto de valores sociales falseados, el consumidor desempeña el papel de peón.

La alternativa

Sin sabor, sin vitaminas, sin variedad, con pesticidas: estas características son los principales motivos que impulsan al consumidor responsable a elegir los productos ecológicos. Como solución a la cuestión económica, un número creciente de ciudadanos apuesta por crear sus propios huertos. Basta un pequeño espacio en el jardín o incluso en el balcón para cultivar hortalizas, frutas o hierbas aromáticas ecológicas. Otra solución que va tomando forma es la rehabilitación de jardines municipales o comunitarios en los que cultivar las antiguas especies que el mercado ha olvidado. Nada más saludable y reconfortante que una ensalada fresca que uno mismo ha cuidado día a día.

Fuente: www.ladyverd.com

jueves, 20 de mayo de 2010

España lidera la producción ´bio´ agrícola pero exporta el 80%.

Ocupa el primer puesto de la Unión Europea y el sexto lugar a nivel mundial.Los cultivos mayoritarios son cereales, olivo, frutos secos y vid.

Ya sea por el sabor de los alimentos, por los supuestos beneficios para la salud o por cuidar del medioambiente, lo cierto es que la agricultura ecológica en España ganan enteros. Por segundo año consecutivo, España se ha colocado a la cabeza de la Unión Europea (UE) en producción agrícola bio y en sexto lugar a nivel mundial, por detrás de Australia, Argentina, Estados Unidos, China y Brasil. El problema, según reconoce la propia ministra de Agricultura y Medioambiente, Elena Espinosa, es aumentar el consumo dentro de las propias fronteras, porque el 80% de la producción se destina a la exportación.

La superficie destinada a agricultura ecológica se incrementó el año pasado en un 21,64%, hasta llegar a alcanzar las 1.602.870 hectáreas, un 5,26% del terreno total destinado a la producción agrícola en España.

Espinosa, que ayer presentó los datos del 2009, destacó además el "importante" aumento del número de empresas que se dedican a producir y manufacturar estos productos agrícolas, que han pasado de 23.473 en el 2008 a 27.627 en el 2009.

LA MITAD Hace 10 años había menos de la mitad de operadores (12.341), lo que demuestra que la apuesta por el cuidado del medio para revalorizar la calidad de los productos ha abierto un nicho de mercado a muchos agricultores.

Los cultivos ecológicos mayoritarios son los típicamente mediterráneos: los cereales, el olivo, los frutos secos y la vid. Y Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura lideran la clasificación de hectáreas verdes. Cataluña apenas representa el 4,48% de los terrenos ecológicos cultivados en toda España, aunque destaca por el alto número (476, solo por detrás de Andalucía) de empresas elaboradoras. Es decir, que se dedican a la manufactura y distribución de alimentos, lo que indica, según el presidente de la Federación Española de Empresas con Productos Ecológicos, Francisco Robles, que es una de las regiones con más compradores.

ANDALUCÍA Si Andalucía lidera los datos es en gran parte por las enormes extensiones de olivar y cereal ecológico. "Pese a la crisis --dice Ángeles Parra, portavoz de Vida Sana y presidenta de Biocultura--, el sector sigue creciendo en todos los sitios".

Aún no hay datos oficiales del consumo medio por español, pero la Sociedad Española de Agricultura Ecológica calcula que es de 7,7 euros anuales, muy lejos de los 30 euros que gastan los europeos. El director técnico de la entidad, Víctor Gonzálvez, culpa a las administraciones de la situación por no haber destinado "suficientes recursos" a campañas publicitarias.

P.Martín-elperiodicodearagon.com

miércoles, 19 de mayo de 2010

Agricultores ecológicos de tiempo libre.

El término municipal de Albacete cuenta con 209 huertos ecológicos gestionados, en gran parte, por ciudadanos que les dedican su tiempo libre.

La provincia de Albacete cuenta con una gran tradición agrícola, por lo que muchos ciudadanos dedican su tiempo libre a las tareas propias del campo. La siembra, el cultivo y la recolección son algunas de las actividades que se realizan en los campos de la provincia, así como en pequeños huertos particulares.

En respuesta a esta intensa actividad, surge en Albacete la Asociación de Horticultores de Ocio Ecológicos (AHOE). En colaboración con el Ayuntamiento de la localidad, estas personas disponen de más de 15.000 metros cuadrados para el cultivo que corre a cargo de socios y aficionados que dedican su tiempo libre a la agricultura ecológica, «podríamos definir al puericultor como un agricultor ecológico radical, el respeto a la naturaleza es la base», afirma Javier Hidalgo, presidente de AHOE.

Este proyecto se desarrolló en una línea de recuperación y mantenimiento de la agricultura respetuosa con el medio ambiente, desde todos los sectores de la población. En Albacete existen más de 200 huertos de ocio, lo que convierte a la provincia en una de las iniciativas más numerosas en cuanto a este tipo de cultivos.

Primer encuentro

Debido a esto, la Finca de La Serrana, ubicada en la carretera de Barrax, ha acogido este fin de semana un encuentro de horticultores organizado por la Asociación de Horticultores de Ocio de Albacete: «Es una forma de reunirnos todos los socios», comenta Javier Hidalgo. Estos agricultores aficionados pertenecen a la zona del sureste español, donde se encuentra la mayor parte de las tierras cultivadas de manera ecológica. Un fin de semana que ha pretendido dar la bienvenida a la primavera con la celebración de estas jornadas en los huertos de ocio de la provincia.

Por este motivo, la Serrana ha recibido la visita de permacultores procedentes de Almería, Granada, Murcia, Alicante y Albacete. Durante estos días los asistentes han podido disfrutar de un amplio programa de actividades. El sábado 15, la jornada daba comienzo con un taller de pan a cargo de la panadería 'Rincón del Segura'. Más tarde el permacultor Antolí, de Elche de la Sierra, ofreció una charla sobre el mantenimiento del huerto sin laboreo, con una demostración práctica. Del mismo modo, los asistentes pudieron visitar el proyecto de huertos de ocio ecológicos de la ciudad de Albacete, ya que el intercambio de experiencias en cuanto a agricultura ecológica es uno de los temas que centra el encuentro.

En la actualidad la finca La Serrana alberga 169 huertos de ocio repartidos en 95 metros cuadrados, según informó el presidente de AHOE, Javier Hidalgo.

AHOE culminó el encuentro ayer domingo con una jornada de puertas abiertas en los huertos de ocio ecológico de la ciudad. A modo de despedida, los socios de la provincia participaron en un concurso de gazpachos manchegos que posteriormente se degustaron en el almuerzo de clausura.

«Es una forma de reunirnos todos los socios y celebrar la llegada de la primavera como una festividad del agricultor», insistió Javier Hidalgo.

Mucha afición

El terreno acondicionado para este tipo de cultivo en Albacete es uno de los más grandes de España. Entre la finca La Serrana y Viveros, la provincia cuenta con un total de 207 huertos de ocio, que mantienen en activo unas 260 personas, «algunas parcelas son trabajadas por varias personas».

Según Hidalgo, la actividad del permacultor trasciende de la propia actividad, «estos van más allá; relacionan el tema de la ganadería o el reciclado con un respeto absoluto a la naturaleza».

Cada uno de estos agricultores dispone de un terreno de 95 metros cuadrados en la finca La Serrana, para el uso y cultivo de las tierras. En estos momentos, 169 hortelanos son titulares de alguna de estas parcelas, mientras que 3 están dedicadas a la investigación y diferentes experiencias educativas. Albacete alberga huertos de ocio desde 2007, cuando se preparó una superficie de 5.000 metros cuadrados para personas interesadas en cultivos ecológicos sin ánimo de lucro, «estos agricultores imitan la actividad natural del propio bosque, por ejemplo, cuando una planta muere no se recoge se deja como abono natural». Tres años después, la asociación cuenta con más de 280 socios, de los cuales 55 no cuentan con un espacio de cultivo personal.

M.Prieto/Vida Sana - M.González/laverdad.es

martes, 18 de mayo de 2010

Comercializar alimentos ecológicos en canales cortos aumenta su consumo.

Todavía existe una fuerte confusión entre producto fresco y alimento ecológico, en el mercado. Además predomina la creencia que el alimento ecológico es exageradamente caro para el consumidor común, cuando esto no es así. Se deben realizar campañas de promoción de envergadura para que esta situación cambie. Estas son entre otras las conclusiones más destacadas de las XVII Jornadas Técnicas de SEAE.

La Sociedad Española de Agricultura Ecológica (SEAE) reunió a cerca de 140 personas que compartieron diversas experiencias en sus XVII Jornadas Técnicas de SEAE, que se celebraron en Almería para analizar los obstáculos a la comercialización y distribución de productos ecológicos en España. Nuestro país aunque es el primer país europeo en superficie de agricultura ecológica, no alcanzamos el 1 % en porcentaje de mercado, lo que nos convierte en un sector emergente. Los españoles consumen sólo 7€/persona y año, mientras que la media europea superar los 30€/persona y años

No es siempre cierto que el incremento del volumen de mercado de alimentos ecológicos tenga que pasar porque estos productos se tengan que vender en los grandes cadenas de supermercados, ya que estas aunque fomenten el abastecimiento, a través de canales cortos, en cuanto a recorrido del producto ecológico, reduciendo los intermediarios desde el lugar de producción, siempre conservan el poder sobre la fijación del precio. Además estas grandes superficies, no realizan una labor de fidelización del consumidor, con lo cuál este tipo de consumidores dejarán de comprar estos alimentos cuando tenga problemas económicos, como ahora en tiempos de crisis

Los canales cortos de comercialización no sólo deben reducir los intermediarios sino que deben hacer posible que los agricultores reciban un precio y reconocimiento más justo para sus productos y para su trabajo. Además debe permitir una relación directa entre productores/as y consumidores/as (pequeñas tiendas, grupos de consumidores, mercadillos, restaurantes, colegios...). Estos vínculos deben fortalecer la confianza y posibilitar que los consumidores tengan acceso a alimentos sanos, y de mayor calidad a precios razonables. Además debe permitir que el valor añadido de la producción agraria, revierta en las pequeñas productores y en el mundo rural, mejorando las economías rurales y la sostenibilidad de la agricultura.

Para impulsar el consumo de alimentos ecológicos en España, se deben modificar la fama de que son muy caros. Ello exige desarrollar campañas de promoción que tengan mayor impacto en el ciudadano que las realizadas hasta ahora

Las XVII Jornadas técnicas de SEAE realizaron en el marco del programa emplea verde del fondo social europeo y la Fundación Biodiversidad, con el apoyo de la Fundación Cajamar y la Asociación Bioindalo, entre otros. Mas info: www.agroecologia.net

lunes, 17 de mayo de 2010

Heliosthana, una isla 100% renovable.

WWF y la fundación alemana Heinrich Böll presentan una guía que muestra cómo alcanzar un futuro de energía limpia basado en Heliosthana, un país ficticio del Mediterráneo. Los principios sobre los que se sustenta Heliosthana se podrían aplicar de forma inmediata en muchos países mediterráneos. Además, están construidos a partir de soluciones realistas que abren el camino hacia un futuro de energía 100% renovable.

Situada en 2020, la isla de Heliosthana combina un menor consumo energético (un 20% inferior al de 2010) con una participación relevante de las energías renovables (un 20% de la producción primaria de energía). En este estado, una parte de la generación eléctrica con renovables se exporta a países vecinos. Además, sectores como la educación, la I+D y la sanidad se benefician del ahorro económico derivado de la menor inversión en combustibles fósiles.

El informe se ha presentado durante la Conferencia Solar de Valencia, en el marco de la Presidencia Española de la Unión Europea. Y si bien Heliosthana es un estado ficticio, cuyo significado proviene de Helios (personificación del Dios del Sol en la mitología griega) y Sthana (lugar en Sánscrito), el documento es realista.

En él se analiza el problema del agotamiento de los combustibles fósiles y su inseguridad en cuanto a suministro de energía, lo que hace que los precios sean inestables. Además, muestra lo imprescindible que es encontrar soluciones inmediatas y tangibles, ya que los efectos del cambio climático y la pérdida de biodiversidad son evidentes. El proyecto de Heliosthana ofrece una respuesta viable para este escenario energético, describiendo una década de transición armoniosa hacia un sistema más sostenible que respete al ser humano y al planeta, manteniendo simultáneamente un desarrollo equilibrado, tanto económico como social.

El Plan Solar Mediterráneo (PSM) ha establecido un objetivo de 20 gigas de capacidad de energía renovable para 2020 y la Desertec Industrial Initiative propone un potencial de inversión en renovables en el norte de África de 400 mil millones de euros para esa fecha. WWF apoya el desarrollo sostenible de energía en la región mediterránea, sin embargo, para ser eficaz, el PSM aún tiene que comprometerse en firme para conseguir una región solar.

La solución está plasmada Heliosthana, donde los objetivos del PSM necesitarían, en primer lugar, formar parte de las estrategias nacionales de los países participantes. En segundo lugar, el PSM debería asumir un papel coordinador para ayudar a poner en práctica proyectos solares nacionales, así como fomentar la cooperación con universidades locales y regionales. También pretende facilitar y reducir el coste ambiental y social de las investigaciones a través de la cooperación regional. Por último, otros proyectos tienen que elaborarse de forma atractiva para los grandes inversores y los bancos.

Jean-Philippe Denruyter, Director de Política sobre energías renovables de WWF Internacional y Consejero Especial del Gobierno de Heliosthana, ha declarado: “WWF considera que Heliosthana se podría convertir en un modelo a seguir por sus vecinos del norte y del sur. También debería ser una fuente de inspiración para el Plan Solar Mediterráneo (PSM) alcance sus objetivos”.

Imagen: WWF

Más información: WWF

domingo, 16 de mayo de 2010

Un huerto en tu ventana.

WindowFarms Project es un ejemplo de colaboración online de ciudadanos de todo el mundo en un proyecto cuyo objetivo es alcanzar una mayor sostenibilidad y solucionar uno de los problemas más acuciantes del medioambiente: cómo proveer a la gente de las ciudades de alimentos frescos y locales.

WindowFarms es una organización sin ánimo de lucro con sede en Nueva York que pretende acercar el cultivo de alimentos frescos a los habitantes de las ciudades mediante huertos verticales hidropónicos en las ventanas de las viviendas.

La agricultura es una de las actividades económicas más contaminantes, no solamente por la cantidad de productos químicos que utiliza y que acaban en las aguas y en la atmósfera, sino por los costes energéticos que requiere la posterior elaboración, transporte y almacenamiento de sus productos.

Por otro lado, muchos ciudadanos, en especial aquellos que viven en los barrios más desfavorecidos, encuentran dificultades para adquirir productos frescos y se ven forzados a alimentarse a base de productos elaborados y envasados, congelados o enlatados.

Estos son dos de los motivos que hacen del cultivo de los propios alimentos uno de los hábitos más sostenibles y saludables que se pueden llevar a cabo.

Lamentablemente, no todos disponemos de un jardín en el que crear un huerto. La mayor parte de la población vive en grandes ciudades, lo que hace asimismo muy difícil el acceso a espacios verdes o infrautilizados en los que cultivar hortalizas.

El proyecto huertos de ventana, Window Farms, propone una solución a estos problemas: lo que comenzó a principios de 2009 como un experimento artístico de las creadoras Britta Riley y Rebecca Bray continuó evolucionando hasta llegar a ser un proyecto abierto de investigación que busca soluciones y comparte experiencias y conocimientos a través su red 2.0.

La propuesta de WindowFarms Project es sencilla: el usuario interesado puede descargarse de forma gratuita en la página web windowfarms.org el kit de instrucciones sobre cómo construir su propio huerto hidropónico en la ventana de su hogar. Todo lo que necesita es una serie de materiales reciclados, baratos y sencillos de adquirir (botellas de plástico recicladas, materiales informáticos…). Siguiendo las instrucciones, el interesado puede crear su propio jardín vertical en el que cultivar alimentos frescos durante todas las estaciones del año.

El proyecto anima a todos los participantes a investigar por su cuenta, a experimentar con nuevos diseños, a innovar y buscar alternativas y a unirse a la red de colaboración online, donde podrán compartir sus ideas, proponer soluciones y desarrollar nuevas técnicas de cultivo de las diferentes plantas mediante la web 2.0 del proyecto.

El diseño, en un principio algo rudimentario, empezó a evolucionar gracias a la colaboración de los participantes, que incluyeron la iluminación con LEDs para potenciar el crecimiento, la implantación de un silenciador mediante un bote de medicamentos reciclado, la aplicación de un sistema de bombeo para el agua mineralizada…

El sistema se encuentra en constante evolución y actualmente existen equipos colaboradores del proyecto en Hong Kong, España, Italia y Finlandia, entre otros países, que están adaptando los diseños a los materiales locales y traduciendo los manuales de instrucciones a sus propios idiomas. Cada colaboración facilita el trabajo de la siguiente persona que se una al proyecto.

El proyecto abierto de investigación WindowFarms Project es un buen ejemplo de colaboración de los ciudadanos que desean desempeñar su propio papel en la revolución verde.

Fuente: Windowfarms / www.ladyverd.com

sábado, 15 de mayo de 2010

El consumo medio de alimentos ecológicos en España.

El consumo medio de alimentos ecológicos en España es de los más bajos de Europa, según apunta la Sociedad Española de Agricultura Ecológica (SEAE), con un gasto de 7,7 euros por persona en estos productos, "cuando la media europea está en treinta euros".

Los responsables de la SEAE, que ayer y hoy están organizando unas jornadas técnicas en Almería, califican de "preocupante" el bajo nivel de consumo de alimentos ecológicos en España "respecto a los países de nuestro entorno", por lo que han organizado quince jornadas técnicas para incrementar el consumo de esta producción.

España es, según han apuntado, la principal productora en superficie de la Unión Europea, y en Almería, hay casi mil hectáreas de invernaderos que producen alimentos ecológicos cuya producción se va a fuera de España "por falta de mercado interno consolidado".

Una ausencia de mercado que motivó la creación en la provincia de la Asociación Bioindalo, una de las organizadoras de las jornadas junto a la Fundación Cajamar, "con el fin de impulsar el consumo local de estos alimentos".

Las jornadas técnicas cuentan estos días con la participación de 140 expertos de España e Italia, de comunidades como Andalucía, Asturias, Galicia, Murcia y Valencia, y tienen como objetivo conocer la dimensión y variedad del mercado de productos y alimentos ecológicos, y plantear nuevas formas de fomentar la comercialización.

Desde la SEAE, se señala que en Andalucía "se han desarrollado diversas experiencias de comercialización, distribución y consumo de alimentos ecológicos en comedores públicos" de escuelas y hospitales y de agrupación de la oferta de los productores "que conviene analizar para potenciar su desarrollo".

Estas jornadas se incluyen en el Proyecto Agricultura Ecológica, Fuente de Empleo Rural (AEFER), cofinanciado por el Fondo Social Europeo y el Programa Emplea Verde, de la Fundación Biodiversidad, y sirven para conocer "la amplitud y evolución de este mercado, así como los aspectos y factores relacionados con la distribución y consumo de los mismos".

Una iniciativa, que a juicio de los responsables de la SEAE, ayudará "a definir medidas para su desarrollo e incremento del consumo nacional" y servirá para "analizar los medios de producción o elaboración" necesarios para realizar la conversión a los agricultores "inseguros"

En estos encuentros se van a intercambiar conocimientos de iniciativas y experiencias sobre la oferta de alimentos ecológicos a nivel local y se van a analizar factores de éxito y fracaso en iniciativas públicas y privadas de impulso del consumo con canales cortos, y analizar la necesidad de materias primas.

Cultivabio

La Asociación Vida Sana ofrece formación y asesoramiento gratuito a profesionales de diferentes ámbitos del sector desde su plataforma www.cultivabio.org, enmarcada también en el Programa Empleaverde de la Fundación Biodiversidad y cofinanciado por el Fondo Social Europeo.

Los cursos disponibles para profesionales autónomos o trabajadores de Pymes de la plataforma Cultivabio son muy variados: desde cursos online de Agricultura Ecológica o Control Biológico, Creación de empresas de artesanía alimentaria ecológica, Cocina con alimentos ecológicos, Comunicación en alimentación ecológica y y consumo responsable, entre muchos otros; hasta cursos presenciales de, por ejemple, Horticultura ecológica con Mariano Bueno en diferentes puntos del país.

De todos estos cursos se ofrecen en estos momentos las últimas plazas, ya que la plataforma Cultivabio entra en su recta final. En octublre finaliza el programa cofinanciado y estos cursos, aunque obviamente se seguirán ofreciendo, renovando y ampliando, no estarán cofinanciados.





M.Prieto/Vida Sana - EP

viernes, 14 de mayo de 2010

Alumnos de varias escuelas venden sus productos ecológicos.

Un buen número de alumnos de diferentes escuelas de Girona que han participado en un programa de huertos ecológicos han vendido sus productos hoy en el mercado de abastos de la ciudad.

Con esta actividad se ha puesto el broche final a una iniciativa que ha servido para que los escolares tomen conciencia sobre la producción de alimentos y sobre las particularidades de la agricultura ecológica.

Los alumnos han comunicado desde un escenario los diferentes productos que han cultivado durante los últimos meses e, incluso, han lamentado en algunos casos los desperfectos causados por las inclemencias meteorológicas que, en Girona, han incluido un temporal de nieve en marzo.

La alcaldesa de Girona, Anna Pagans, ha acudido al mercado de abastos, donde los estudiantes compartían escenario con los habituales agricultores que venden allí sus productos, para interesarse por la experiencia.

Pagans ha explicado a los medios de comunicación que las casi veinte escuelas participantes en el proyecto, que vive su segunda edición, disponen así de una actividad que cuenta con "una importante parte educativa que, en este caso, no es otra más que la de comer bien.

Fuente: M.Prieto/Vida Sana - Abc.es

jueves, 13 de mayo de 2010

Intensiva y ecológica ¿Una agricultura utòpica?.

El modelo agrícola intensivo está planificado para alimentar a todo el planeta y paliar el hambre que sufre gran parte de la población mundial. Sin embargo, el actual modelo de agricultura intensiva conlleva el empobrecimiento de la tierra de cultivo, causa enormes daños medioambientales y se basa en la utilización de productos químicos derivados del petróleo que desestabilizan los costes de producción agrícola.

Estas evidencias hacen que sea imprescindible encontrar un modelo alternativo capaz de alimentar a 9.000 millones de seres humanos hasta 2050, suministrarles energía y biomateriales y que al mismo tiempo respete el medioambiente.

Una de las alternativas que podrían resultar viables para este fin y que fue objeto de debade durante el pasado Salón de la Agricultura de París, que tuvo lugar en marzo de 2010, es la Agricultura Ecológicamente Intensiva (AIE). Este método, cuya teoría fue desarrollada por el ingeniero agrónomo y economista francés Michel Griffon, aprovecha el funcionamiento natural del medio, en lugar de someter a la tierra a un proceso artificial. Según Michel Griffon," debemos adoptar un sistema productivo que respete el funcionamiento y las restricciones de la diversidad ecológica. La AIE intenta ser pragmática y no ideológica. Existen numerosas técnicas que se pueden aplicar. Yo he censado unas 1.500 para poner en marcha en función de las condiciones locales".

La agricultura ecológicamente intensiva ya existe, muchos agricultores utilizan métodos propios de este tipo de agricultura tales como la lucha biológica, la siembra directa sobre rastrojo o la agroforestería (técnica basada en la combinación de árboles y arbustos con cultivos y ganado). Otras técnicas de la AIE supondrán una auténtica revolución en el mundo agrícola. Es el caso del fin de la labranza, técnica ancestral que hoy en día se está reconsiderando en beneficio de la siembra directa sobre rastrojo. Cada vez más expandido por el mundo, este método aúna tres grandes principios: ausencia del trabajo del suelo (arado), una cobertura vegetal permanente (residuos del cultivo anterior o de plantas) y una rotación razonada de los cultivos.

Los beneficios de este método son numerosos: la cobertura alimenta a los organismos que dan vida al suelo y mejoran su fertilidad. Otros beneficios son que se frena la erosión del terreno, se consigue un importante ahorro de agua y combustibles al mismo tiempo que un elevado rendimiento incluso en tierras de dudosa fertilidad.


Buenas hierbas contra malas hierbas

En la lucha contra las malas hierbas, la AIE propone el aprovechamiento de las alelopatías de ciertas plantas. Especies como el sorgo o el trigo sarraceno segregan unas moléculas que se comportan como herbicidas naturales. Las posibilidades de los fenómenos alelopáticos en la reducción del uso de herbicidas y fungicidas son enormes y aún escasamente aprovechadas.

La Agricultura Intensivamente Ecológica (AIE) supone un avance en la lucha contra el calentamiento global. En ella, los agricultores no gestionan simples técnicas, sino procesos globales que combinan los tratamientos naturales contra las plagas y una intensa prevención de los daños para que el uso de pesticidas sea el último recurso.

Un complejo sistema

En general, los sistemas agrícolas ecológicamente intensivos son más complejos ya que reúnen un mayor número de especies que un terreno cultivado de forma convencional. Pero está comprobado que, cuanta mayor biodiversidad, mayor productividad del sistema y mayor resiliencia ante los riesgos climáticos y ante los ataques de plagas y enfermedades.

Una política que estimule la AIE

El cambio de hábitos y de técnicas supone un riesgo para el agricultor. Este riesgo es aún mayor si tenemos en cuenta que la mayoría de los agricultores del mundo son pobres.

Los agricultores no deben encontrarse solos frente a tanta incertidumbre y la sociedad tiene la obligación de apoyar a esta profesión cuyas responsabilidades sociales y medioambientales son muy grandes. Sin el apoyo de los poderes públicos, será prácticamente imposible que puedan expandirse las técnicas de la agricultura ecológicamente intensiva.

Por otra parte, los beneficios ecológicos que aporta la AIE tales como la purificación del agua, el mantenimiento del nivel de las capas freáticas, el almacenamiento de CO2, el freno de la erosión, la conservación de la biodiversidad y del paisaje, constituyen un incentivo para impulsar su difusión.

Costa Rica

En Costa Rica, la ley aprueba desde 1997 la remuneración económica a los agricultores en concepto de cuatro servicios ecológicos: el almacenamiento de CO2, la conservación de la biodiversidad, la regulación del agua y la belleza de los paisajes. El dinero con que se retribuyen estos servicios proviene de una tasa sobre los hidrocarburos. Asimismo, el sector privado también paga a los agricultores por servicios ecológicos tales como la reforestación cerca de las presas hidroeléctricas para limitar la erosión o por la conservación de paisajes, de gran interés para las compañías relacionadas con el turismo. Estos pagos permiten a los agricultores superar la barrera psicológica que representa el cambio de técnicas, además de suponer un ingreso suplementario a su actividad.

El ejemplo de Laos

El gobierno de Laos lleva a cabo desde hace 15 años un plan de difusión del método de siembra directa sobre rastrojo vegetal con la ayuda del CIRAD (Centro de investigación francés de ayuda al desarrollo de la agricultura en los países del sur). El método es ideal para los suelos montañosos de este pequeño país asiático que, cada año, se degradan debido a los violentos monzones. En Laos, el 80% de la población vive de la agricultura, hecho que hace aún más necesaria la conservación de su suelo de cultivo.

Para convencer a los agricultores de la eficacia de esta práctica, se llevaron a cabo varios proyectos piloto cerca de la frontera con Tailandia. De esta forma, el gobierno decidió de extender el método a todo el país e impartir formación en los establecimientos agrícolas. Actualmente, el principal objetivo es implicar al sector privado en el desarrollo y la difusión de este método agrícola, ya que en Laos los sistemas de monocultivo intensivo están financiados por la iniciativa privada y los beneficios del método de siembra directa sobre rastrojo vegetal son menores a corto plazo, aunque la garantía de cosecha es más estable y mayor a medio y largo plazo.

Fuente: www.ladyverd.com

miércoles, 12 de mayo de 2010

El hombre que miraba a los ojos de las cabras.

El despoblado valle burgalés de Manzanedo revive gracias a una explotación de cabras alpinas francesas para queso ecológico. Y se convierte en el único habitado sólo por colombianos .

Ocurrió en la finca que explotaba en Lerma. Una paisana vio al ingeniero agrícola Alfonso Pérez-Andújar doblar su alta figura para beber un sorbo de agua del manantial.

-¿Qué pasa?

-No puede ser.

«Entonces dirigía una explotación ganadera enorme», recuerda Pérez-Andújar.

«Producíamos carne de vaca y de cerdo y regábamos los campos con sus purines los 365 días del año. Teníamos todos los permisos, pero el papel no sabe lo que es la Naturaleza. Trabajaba en un macroproyecto magnífico. Pero era una aberración. Ganaba dinero, cumplía las normas... y, sin embargo, aquello era una verdadera locura».

Hace quince años que Alfonso Pérez-Andújar, un dandy rural que calza zapatos franceses y usa anchos tirantes 'Cabelas' y gorra de basket, se cayó del caballo y descubrió la luz. Dijo adiós a los fitosanitarios, abonos y pesticidas, y, gracias a los conocimientos y a las ganancias de su pasado, compró 850 hectáreas en el fin del mundo. El valle se llama Manzanedo y se encuentra a diez kilómetros de Villarcayo, en Burgos.

«Es una locura, un terreno montañoso y agreste, la antítesis de lo que buscaría un ingeniero agrícola para ganar dinero. Pero aquí la Naturaleza es salvaje y virgen», susurra con una admiración que no disimula.

Dispuesto a no repetir la experiencia depredadora de sus años de juventud se ha decidido por criar cabras, un animal muy delicado y no muy del gusto de los industriales por sus aprensiones y gustos exquisitos, para producir queso ecológico. 'Santa Gadea' es aún un millar de raras y caras cabras alpinas francesas que crecen y se reproducen en galpones de madera y que pastan en las campas cercanas a la explotación.

A su cuidado se entregan siete peones colombianos, llegados para trabajar y repoblar con sus familias el abandonado Rioseco. Hoy conforman un lugar único en España, un auténtico pueblo 'paisa' con trece vecinos y cuatro casas abiertas. Montaña arriba, en San Martín del Rojo, vivía un pastor de ovejas, Manuel, que fumaba caldo de gallina y caminaba hasta la carretera tres veces por semana para cargar con pan para él y sus perros. Manuel, el último habitante del valle, murió hace un año. Alfonso, en un ejercicio de redención, ha plantado también 600 hectáreas con árboles autóctonos: quejigos (robles), chaparros (encinas), hayas... «La variedad vegetal del valle es espectacular», se extasia mientras señala las sabinas, los acebos, los endrinos de todos los colores, las aliagas y la madreselva, los tilos, tejos y espinos que pueblan las laderas. Una pareja de águilas sobrevuela el paraje. Después veremos dos corzos, los príncipes del bosque, ramoneando los tiernos brotes de la finca.

«¿Ven? El equilibrio natural es asombroso. Pero el hombre ha destrozado la Tierra. Yo me niego a seguir haciéndolo. No podemos seguir tratando a la Naturaleza como algo que nos conviene. Cuando era niño iba a pescar a cualquier río de España y había ranas, cangrejos, mariposas... ¿Qué vamos a dejar a nuestros hijos?», argumenta.

Ahora Alfonso está en lo verde. Y se entrega al mundo alternativo con pasión y conocimiento. Ha puesto su experiencia al servicio de una explotación modélica, que aprovecha los últimos adelantos y servicios de la ganadería, esta vez con marchamo ecológico, al servicio de las cabras.

Mil cabras, cero aroma

Cuando el forastero entra en los enormes pabellones donde viven cientos de cabras y cabritillos se extraña. Hummmm. Aquí no huele a chotuno. Sólo un leve aroma a heno se eleva de entre las reses. El secreto lo tiene un japonés: El doctor Terugo Higa es el descubridor del papel que juegan determinadas bacterias (las responsables, por cierto, de algunas nobles fermentaciones y podredumbres) en el medio natural.

Alfonso nos introduce en el complejo mundo de las explotaciones caprinas, de cómo los animales tienen su primer parto con 15 meses de vida y de que, una vez paridas, dan leche durante siete meses. «La producción óptima de un ejemplar adulto son tres litros diarios», apunta. La idea es producir 800.000 litros para hacer un queso único y con garantías para ser exportado a Estados Unidos «donde el 20% de todo lo que se consume es ecológico». «La leche de cabra es la más parecida a la materna, su grasa es la que mejor sienta a nuestro estómago», instruye. Habrá, asegura, dos tipos de queso 'Santa Gadea': uno, tipo Camembert (de pasta blanda y cremoso) y, otro, estilo Crottin, algo más curado. En total, unos 100.000 kilos por año.

La tarea del pastoreo y ordeño de las cabras, de la plantación del arbolado y del cuidado de la finca corresponde a la cuadrilla de peones. Gabriel Ángel Restrepo (62 años) y su esposa Orfilia Giraldo (55), son los mayores. Gabriel recorre la finca muy orgulloso con el gigantesco machete 'Bellota' aferrado a la cintura en su funda con los colores de la bandera. «Nos gusta el sistema de trabajo, la tranquilidad y el estar muy aparte de ese entorno de ciudad con tanto bullicio.

Yo nací en un ambiente rural, después de que me hice persona estuve en mitad de la gente y ahora vuelvo al campo», dice el padre de Elkin, el rubicundo capataz. «Don Alfonso nos deja trabajar; no está encima de las personas: nos da pautas. Es siempre mejor trabajar en un ambiente limpio, que rodeados de suciedad», constata. Elkin, natural de Cali, tiene dos chiquillas: Denise estudia en el 'Princesa de España' de Villarcayo. La pequeña Mahena (dos años) está al cuidado de la abuela.

Los peones cobran unos 900 euros al mes y trabajan seis días a la semana, en un sistema de libranzas que permita el cuidado diario de las cabras. A esas tareas se aplican Arnulfo de Jesús Restrepo (de 58 años, casado con Dora Muñoz de 44, que cuida la casa del patrón y es madre de Sorelli), Albeiro Buitrago (23), Harrison Rozo (29), Rened Cárdenas y Ángel Gélvez, casado con Nancy, que viven en Villarcayo. El grupo lo completan Blanca y Lina Gómez, la secretaria.

«Voy sobre dos años y poquito por acá», dice con su suave acento Arnulfo de Jesús, de Amagá, en el departamento de Antioquia. «Y aquí me ve 'dedicao' a las cabras. Me gusta, sí señor. El trabajo del campo es bueno. Llegamos aquí como ganaderos ¿no es cierto? ¿Lo que me extraña?... Pues el clima. En Colombia, en verdad, son siempre 30 grados. En Burgos hemos visto nevar por primera vez en la vida. ¡Qué frío!», se sonríe.

Son gentes alegres y dóciles que suspiran por la comida paisa, el sancocho de gallina, los frijoles y las arepas, que combaten el tedio con la televisión por satélite y las canciones de Leo Dan, Pipe Bueno y Los Pasteles Verdes, pura música de despecho. «Aquí cuesta dormir, se sienta una a comer sola, a dormir sola, nadie pregunta por una... y los niños me lloran por teléfono», se duele Blanca Lucía Buitrago (34), madre de seis hijitos de quienes se despidió «echándoles la bendición» mientras dormían. «La diversión aquí queda muy lejos. Mi vida es ahorrar y ahorrar para irme rápido», dice.

Los hombres escaparon también de las obligaciones del servicio militar en mitad de la selva y frente a las FARC. Las imprevisibles y meonas cabras son, no es cierto, otra cosa. Aunque estén en mitad de ninguna parte.


J.Méndez/eldiariomontanes.es

martes, 11 de mayo de 2010

Los derechos de la naturaleza.

En la reciente Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático, celebrada en Cochabamba (Bolivia), se habló ampliamente de una comunidad muy agredida y maltrecha, y se mostraron hacia ella constantes referencias de solidaridad y mensajes de apoyo. Hablaban, claro, del planeta Tierra, la madre naturaleza o la Pachamama, sinónimos todos de la más grande comunidad de vida conocida.

Lo sabemos pero lo ignoramos. La Tierra es un ser vivo, ahora malherido. Sufre una fiebre constante que, si continúa progresando, puede generarle algunas patologías irreversibles.

El aire que respira es cada vez más pobre en oxígeno y así, mal alimentada, envejece precozmente. Sus arterias –los ríos, el mar– están contaminadas e infestadas, lo que le resta energías. Las células que la conforman –especies vegetales y animales– corren el riesgo de desaparecer. Y el ritmo que le exige una de estas especies, la humana, es tan acelerado que –dicen los expertos– en menos de 20 años necesitaría una hermana gemela, un segundo planeta, para ser capaz de seguir ofreciendo y regalando todo lo que hoy le exigimos a golpe de perforadora, arrastrando redes sobre su lecho marino y envenenando su fina capa de piel –la tierra fértil– con químicos muy agresivos.

Conscientes de esta realidad, las más de 35.000 personas reunidas en Cochabamba (mayoritariamente campesinas, indígenas, pescadoras, miembros de organizaciones ambientalistas, de mujeres, de movimientos sociales, etc.) supieron ponerse de acuerdo y sentar las bases de una estrategia común frente al cambio climático, a diferencia de lo ocurrido en Copenhague hace unos pocos meses. Y así ha quedado recogido en el llamado Acuerdo de los Pueblos (www.cmpcc.org).

Entre las propuestas sobresale la iniciativa de consensuar una Declaración Universal de los Derechos de la Madre Tierra. Fíjense. Si somos capaces de deconstruir nuestra concepción antropocéntrica, podremos entender y abrazar un planteamiento biocéntrico (según la terminología que define Eduardo Gudynas), donde añadimos a los derechos individuales y colectivos de los seres humanos –civiles, políticos, económicos, sociales, culturales y ambientales– los derechos propios de ese otro ser, la naturaleza. Pero, decía, nuestras sociedades occidentales, fundamentalmente, han de hacer un esfuerzo para que se produzca este cambio de registro, pues llevamos muchos siglos considerando la naturaleza como un espacio salvaje que hemos de dominar para, bajo nuestro control, convertirla en una despensa supuestamente inagotable para el disfrute del ser humano. Aquí radica, desde mi punto de vista, una de las virtudes de la declaración: corregir un pensamiento que está en la base de la crisis global actual.

El proyecto de una Declaración de los derechos de la naturaleza ya tiene antecedentes. Para la nueva Constitución de Ecuador, la Pachamama es “donde se reproduce y realiza la vida” y “tiene derecho a que se respete integralmente su existencia y el mantenimiento y regeneración de sus ciclos vitales, estructura, funciones y procesos evolutivos” (artículo 72). A partir de esas premisas, la naturaleza pasa a ser ella misma objeto de derechos, tiene valor por sí misma, independientemente de la utilidad o usos que le quiera dar el ser humano y “toda persona, comunidad, pueblo o nacionalidad podrá exigir a la autoridad pública el cumplimiento de los derechos de la naturaleza”. Y de aquí nace otra de las iniciativas surgidas en Cochabamba: el Tribunal Internacional de Justicia Climática y Ambiental, que podría marcar justiciabilidad en aquellas acciones u omisiones que vulneraran los derechos de la naturaleza.

Como dice Alberto Acosta, una constitución (o, en este caso, una declaración) no hace a una sociedad, sino que es un proyecto político de vida en común que debe ser puesto en vigencia con el concurso activo de la sociedad. La elaboración y supuesta aprobación de esta Declaración se erigiría, y esta sería su segunda gran virtud, como eje orientador –como una nueva ética– para propiciar los cambios estructurales e impulsar las transformaciones que necesita nuestra sociedad global. Sin capacidad para exponerlos todos, resalta la revisión que forzaría al abandono de las políticas extractivistas en las que andan ahogadas muchas economías de los países del Sur como suministradores de los países ricos, incluido también el caso de Ecuador que, a pesar de todo, sigue promoviendo la explotación de petróleo en la región amazónica, la minería sin sentido o una agricultura dependiente de los agroquímicos. Aunque los seres humanos tenemos derecho a beneficiarnos del ambiente y las riquezas naturales que nos permitan un buen vivir (concepto también indigenista que excluye lujos innecesarios), este derecho debe ser compatible con los conjuntos de vida. No son aceptables extracciones de petróleo si atentan contra comunidades originarias, igual que no son aceptables técnicas agrícolas que acaban con ecosistemas de cualquier orden.

Desde los países andinos surgen propuestas de una capacidad transformadora inmensa, que seguro generarán muchas contradicciones y tensiones frente a la ideología del progreso imperante que asocia desarrollo sólo con crecimiento económico. Incluso puede que parezcan absurdas, como absurdas les parecía a los grupos dominantes la emancipación de los esclavos o la extensión de derechos civiles a los afromericanos, a las mujeres y a los niños y niñas.

Gustavo Duch Guillot - Diario Público

lunes, 10 de mayo de 2010

Andalucía. Agricultura ecológica y biodiversidad.

La agricultura y la ganadería no dejan de ser una intervención en el medio natural que produce una simplificación espacio-temporal de las comunidades existentes produciendo un impacto en el medio que en mayor o menor medida, afecta directamente a la Biodiversidad original. Por ello es indispensable que la agricultura tiene una gran influencia sobre ésta. Sabemos por los numerosos datos que se dispone que la agricultura racional e intensiva se ha encargado de machacar en las últimas décadas y aún hoy día, a la biodiversidad en su sentido más amplio. Sin embargo, la agricultura y ganadería ecológica es un modelo que precisamente tiende a recuperar, conservar y aumentar la diversidad de los agrosistemas.

Desde hace veinte años desde la Asociación CAAE venimos trabajando por y para el desarrollo de la producción ecológica. Somos conscientes de nuestra responsabilidad, por una parte como certificadora, con cerca de 800.000 hectáreas entre Andalucía y Castilla-La Mancha, y por otro lado, como asociación que trabaja con una visión global en formación, promoción, divulgación... en la tarea de tener un sector profesional y empresarial con una visión de conservación-producción de nuestro medio. Con la práctica de la ganadería y agricultura ecológica disminuye la emisión de gases responsables del efecto invernadero y las técnicas empleadas favorecen la existencia de diversidad de especies y diferentes ambientes, lo que afecta tanto a la biodiversidad, el agrosistema y a sus alrededores. La oposición a los transgénicos, el fomento y conservación de variedades y razas locales-autóctonas son medidas que apuestan por la diversidad genética. Además, estos recursos fitogenéticos pueden ser claves para el desarrollo de la agricultura en los próximos años ante el reto que se nos presenta con el cambio climático. Las razas y actividad ganadera son fundamentales en la prevención de incendios y por tanto en la conservación del medio natural.

Como Asociación CAAE se ha trabajado por innovar, creando líneas de trabajo con el objetivo de poner en valor la biodiversidad ante la sociedad en general. Campañas como la de diversificación del paisaje agrario llevan ya diez años funcionando. A través de ésta y mediante el convenio suscrito con la Consejería de Medio Ambiente, se han repartido más de 3 millones de plantas a lo largo de todo este tiempo, con el objetivo de que nuestros campos recobren la complejidad botánica que tenían antes de surgir la tendencia de la llamada agricultura moderna e intensiva a eliminar a todo elemento que no fuese el cultivo. Por otro lado la campaña sobre fauna beneficiosa ha puesto en valor a las numerosas especies de interés, tanto ecológico como económico, por su papel en la regulación natural de las plagas en agricultura. En los últimos años se ha editado material temático y organizado sobre treinta actividades específicas sobre este tema de diferentes comunidades contado con una gran aceptación. También se ha comenzado a trabajar en las aves insectívoras de los agroecosistemas considerándolas como unas reguladoras de plagas extraordinarias y por ello, con repercusión económica, es significativa la experiencia en dehesas.

La producción ecológica hace posible que la biodiversidad no se vea afectada de forma negativa y que nuestro entorno siga ofreciéndonos la posibilidad de disfrutar de nuestro patrimonio rural y natural. Los hombres y mujeres del campo son quienes lo ponen en práctica y por consiguiente los protagonistas. No obstante, no tienen toda la responsabilidad de cara a la conservación de la biodiversidad. Todos somos de una u otra forma responsables y hemos de tener conciencia de ello para así actuar en consecuencia, como así hacemos desde la Asociación CAAE.

Fuente: Francisco Casero Rodríguez. Diario de Cádiz.

domingo, 9 de mayo de 2010

Té de Assam orgánico gracias a la Ayurveda.

En india, la medicina tradicional ayurvédica ha permitido transformar los residuos de carne y pescado o las hierbas con metales en fertilizantes orgánicos, que se suman al jacinto acuático, el estiércol y la orina de vaca como abonos para convertir en ecológico el té de Assam, la mitad del que se produce en el país. El proceso podría limpiar el medio rural, contaminado por el alto uso de insecticidas, repelentes de plagas y fertilizantes químicos altamente tóxicos.

El nuevo concepto de agricultura ecológica se sirve de los conocimientos ancestrales a base de plantas para convertir cualquier desecho contaminante en abono orgánico. Por ejemplo, el mercurio, utilizado en la medicina tradicional india, diluido con otras sustancias se convierte en un fertilizante excelente. Con todo, el resultado es sostenible y rentable.

El rescate de un negocio doliente

Este sistema de agricultura orgánica pondrá freno al proceso intoxicante que ha penetrando en la cadena de alimentos y amenaza la salud de millones de personas. Además, también puede aumentar el alicaído precio del té de la India y abrir nuevos nichos de mercado, con lo que la industria del té podría superar el estrangulamiento que provocan los altos costes de producción debidos, entre otros factores, al encarecimiento de los fertilizantes químicos.

La región de Gossainbarie, en el noreste de la India, lidera la nueva y exitosa forma de cultivar, después de que su producción anual cayera desde 900.000 kg. de hojas de té a 355.000 kg. Un año después, se preparan para producir 600.000 kg.

La India produce una cuarta parte del té mundial. Su producción ecológica implica el cuidado paralelo de vacas que proporcionan, además de desechos esenciales para el abono, una fuente extra de ingresos. De ahí el impulso que se le está dando. Una vez más, los antiguos conocimientos, unidos a los modernos conceptos de gestión, demuestran que pueden generar un nuevo modelo de economía sostenible.

Fuente: www.ecogaia.com

viernes, 7 de mayo de 2010

Efecto positivo al tomar zumo de naranja con las comidas.

Los flavonoides del zumo de naranja suprimen el estrés oxidativo de las comidas ricas en grasas y en carbohidratos.

Según un nuevo estudio realizado por endocrinólogos de la Universidad de Buffalo, tomar alimentos que contienen flavonoides --como el zumo de naranja, en este caso-- junto con una comida con un alto contenido en grasas y carbohidratos neutraliza el estrés inflamatorio y oxidativo generado por la comida no saludable y ayuda a prevenir daños en los vasos sanguíneos.

Se sabe que los radicales libres o especies reactivas del oxígeno inducen la inflamación en el revestimiento de los vasos sanguíneos y aumentan el riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular. Los investigadores del estudio afirman que el potente efecto preventivo del zumo de naranja probablemente esté relacionado con su elevado contenido de los flavonoides naringenina y hesperidina, que son importantes antioxidantes.

"Nuestros datos muestran, por primera vez hasta donde nosotros sabemos, que beber zumo de naranja con una comida rica en grasas e hidratos de carbono impide el notable incremento de especies reactivas del oxígeno y otros agentes inflamatorios", señala Husam Ghanim de la Universidad de Buffalo y autor principal del estudio.

"Esto no sucedió cuando los participantes bebieron agua o una bebida azucarada con la comida", añade. "Los problemas de inflamación después de una comida son importantes porque se sabe que los elevados niveles de glucosa y triglicéridos resultantes están relacionados con el desarrollo de eventos cardiovasculares".

El estudio aparece en la edición de marzo de la revista American Journal of Clinical Nutrition y fue publicado en línea previamente a su impresión.

Fuente: Science Daily

jueves, 6 de mayo de 2010

Las ventajas de la producción ecológica.

La agricultura tradicional, la de nuestros ancestros, la que se ha ido gestando con el cultivo, adaptación y mimo de las especies salvajes durante 7.000 años, la que ha ido mejorando la adaptación al medio de los seres humanos, con la aportación de nutrientes fundamentales para las defensas en situaciones adversas, ha sido fundamental para que hoy concibamos la agricultura ecológica tal cual es con la aportación de la sabiduría de la tradición, rota hace escasamente 70 años con la irrupción del uso de productos químicos, como abonos, herbicidas y pesticidas, en la producción agrícola y que traería consigo el desarrollo de la agricultura extensiva, forzándola aún más con la imposición del monocultivo, y por tanto perdiendo gran cantidad de sustancias que aportan a los seres humanos importantes defensas frente al medio o adquiriendo otras que nos vuelve vulnerables a las agresiones del medio.

¿Por qué debemos consumir alimentos ecológicos? La industria y la agricultura ecológicas son más sanos al no utilizar en su producción fertilizantes y pesticidas químicos que disminuyen la producción de sustancias defensivas para los seres humanos, mejorando las cualidades organolépticas de los alimentos, que también mejoran al no utilizar conservantes, potenciadores del sabor, etc., sino sólo sustancias naturales, como antigua y tradicionalmente se hacía, con el olor y el sabor de lo autentico. La mayor garantía alimentaria la tiene hoy día la producción agrícola ecológica, obligada a varios controles de calidad desde la certificación de la calidad de las tierras hasta 3 ó más controles durante la producción, y en caso de incumplimiento, retirada de la certificación. La producción ecológica está protegida por una estricta normativa de calidad y control. Por añadidura, fomenta un desarrollo rural sostenible.

Desde el inicio de esta década que estamos concluyendo, diversas investigaciones médicas, y en distintos países, han aportado conclusiones que ya debieran tenerse más en cuenta por los programas agrícolas de los países “civilizados”. En el año 2002, un grupo de investigadores británicos realizó un estudio en el que aseguran que el consumo de alimentos ecológicos podría reducir el riesgo de sufrir ataques cardíacos y el riesgo de sufrir cáncer. Afirman que los vegetales ecológicos contienen niveles de ácido salicílico seis veces por encima de los vegetales no ecológicos y que esto podría reducir ambos riesgos.

En los EE UU, año 2003, el debate sobre si los alimentos ecológicos son más saludables o no que los alimentos convencionales se encontró con nuevos resultados científicos. Expertos de la Universidad de California concluyeron que las frutas y los vegetales cultivados con métodos ecológicos contienen niveles más altos de antioxidantes. Los análisis realizados en productos como trigo y zanahorias demostraron que la reducción de pesticidas y herbicidas permite a las plantas producir una sustancia natural, denominada phenolics, que actúa como agente protector de las plantas. Estas sustancias contienen componentes naturales que poseen una actividad antioxidante capaz de combatir enfermedades provocadas por insectos. La aparición de esta sustancia natural disminuye con el uso de herbicidas y pesticidas utilizados en la agricultura convencional. “Esto explicaría por qué los niveles de antioxidantes son más elevados en alimentos ecológicos”, aseguró Mitchell, uno de los responsables del estudio, publicado en Journal of Agricultural and Food Chemistry. Los niveles de antioxidantes en productos ecológicos como el trigo pueden ser hasta un 58% más altos que en los del trigo convencional. En otros productos la cifra puede llegar al 50% más de antioxidantes, y en el caso de las zanahorias ecológicas la cifra llega hasta el 19%. Los expertos apuestan por una combinación de métodos de producción ecológicos con prácticas convencional para aumentar los niveles de antioxidantes.

En 2006, investigadores del Instituto de Investigación de Agricultura Ecológica de Suiza aseguraban que los cultivos ecológicos aportan muchos más beneficios que los cultivos actuales tanto a los consumidores como a las tierras de cultivo. La concentración en los suelos ecológicos de nitrógeno, fósforo y otros nutrientes naturales son entre un 31% y un 51% más altos en los cultivos ecológicos que en los convencionales. Esto convierte a los suelos ecológicos en más fértiles y permite mayor diversidad de nutrientes que absorben los suelos.

Julia Franco Zapata - Ecologistas en acción

Carcaboso, el primer municipio extremeño en declararse libre de transgénicos.

La Plataforma Extremeña Contra Los Transgénicos (PECT), constituida por más de 25 organizaciones tanto de ámbito extremeño como estatal, expresa su satisfacción por la aprobación de la Moción por la que se declara el municipio de Carcaboso (Cáceres) “Zona Libre de Transgénicos”, aprobado en el pleno del ayuntamiento el día 27 de Abril y declarado en acto público el 30 de Abril coincidiendo con la inauguración del Centro Agroecológico Demostrativo de Carcaboso. Se trata del comienzo de una campaña que persigue conseguir esta declaración en todos y cada uno de los municipios de la Cáceres y posteriormente en toda Extremadura.

“Expresamos hoy una profunda satisfacción pues vemos más cercano el deseo de la mayoría de los ciudadanos, que, conscientes de los peligros de estos cultivos modificados genéticamente (MG), quieren vivir en un mundo sin transgénicos”, afirma Mireia Llorente, representante en la PECT de Ecologistas en Acción.

La comercialización de alimentos transgénicos es un acto irresponsable que convierte a los consumidores en cobayas humanas. Las multinacionales agrotecnológicas se prometen grandes beneficios económicos, mientras el riesgo lo asumen los ciudadanos y el medio ambiente. Ante este panorama, las encuestas siguen mostrando el rechazo masivo de los consumidores a los transgénicos.

Doce años después de su introducción en los mercados, las grandes promesas de los cultivos transgénicos están muy lejos de hacerse realidad: Ni han aumentado el rendimiento de los cultivos; ni han mejorado la calidad de los alimentos y del medio ambiente; ni han contribuido a solucionar el problema del hambre en el mundo. Por el contrario, en los principales países productores están apareciendo ya problemas agronómicos relacionados con este tipo de cultivos, se están agudizando los problemas ambientales como el abuso de pesticidas y empeoran las situaciones de pobreza, injusticia y exclusión social.

En España, el país europeo con mayor superficie de cultivos transgénicos -80.000 hectáreas de maíz en 2009 según el Ministerio de Agricultura- existe una absoluta falta de control y de seguimiento de sus repercusiones, así como falta de transparencia y de trazabilidad, como ha puesto en evidencia el informe “La Imposible Coexistencia”.

Ante la agresión sin precedentes que suponen estos peligrosos cultivos, son ya 9 países, 172 las regiones y 4500 los municipios de toda la UE que se han declarado libres de transgénicos, lanzando así un claro mensaje a una Comisión Europea que sigue anteponiendo los intereses de las multinacionales a los de los ciudadanos y del medio ambiente. Un gran número de organizaciones sociales y agrarias lleva años reclamando la retirada de los cultivos transgénicos del territorio español, pues deplorablemente, ha sido estos años pionero y campo de pruebas de los cultivos transgénicos en la Unión Europea y la población agraria esta sufriendo presiones constantes (y falsas promesas), para que sus campos se llenen de variedades transgénicas, destruyendo así el modelo de agricultura que la sociedad les esta demandando.



Más información: extremaduralibredetransgenicos@gmail.com